El reino del azúcar
Seamos sinceros, en general la dieta infantil en España es un verdadero desastre. Bollitos, azúcares, exceso de sal, limitación de nutrientes, alimentación altamente proteica… pero es que esta situación empeora en cualquier celebración que se precie, más aún en los cumpleaños. Y me diréis, “Nur, no seas exagerada, los niños cumplen una vez al año”… y sí, la mía cumple solo una vez al año, igual que cumplen solo una vez al año sus trece compañeros de clase (mi peque va a un cole de rango pequeño, algo que para mi era muy importante), y sus otros tantos amigos de la urbanización también solo cumplen una vez al año, y también los hijos de nuestros amigos de siempre cumplen solo una vez al año… lo cual se traduce en que al menos dos fines de semana al mes tenemos fiesta de cumpleaños de algún peque de nuestro entorno.
No sé en otros lugares de España, cuando he vivido en otras ciudades no tenía hija y tampoco me relacionaba mucho con niños, pero aquí (en Madrid) se suele celebrar el cumpleaños en un parque infantil con todo el pack incluido: atracciones variadas, merienda/cena con pizza/perrito caliente+ bebida de lacteo+fruta (más muuucha azúcar) y tarta con más o menos fondant. En la celebración normalmente no fallan los gusanitos, cheetos, patatas, galletas y golosinas variadas y al irte no suele faltar la bolsa de chuches. Todo se resume en que sábado sí, sábado no acabamos requisando una bolsa enorme de caramelos (literalmente tenemos un alijo en un armario de la cocina) y con una niña empachada por todo lo que ha llegado a ingerir en tres horas de evento.
¿De verdad no hay otra opción para celebrar el cumpleaños de los peques de forma saludable?
Lo primero que os contaré es que yo hace dos años sí celebré un cumpleaños saludable, pero este año mi peque ha querido compartir con su amiguita el evento y eso ha implicado que he acabado cometiendo todos los errores que antes os he nombrado (entono el mea culpa).
Veamos unos tips para mejorar esas maravillosas fiestas que se avecinan este año:
- Elige un local de juegos donde puedas llevar tu propia comida o que te ofrezcan opciones saludables dentro del menú infantil (ojo, ten muy en cuenta tanto las intolerancias como las preferencias personales y religiosas de los papas del resto de los pequeños asistentes a la fiesta).
- Elige opciones de juegos con contenido emocional que aporten experiencias a los niños: talleres, juegos de equipo, teatros, bailes..
- No dejes que los caramelos, la tarta, las piñatas, los helados, ni los regalos de plástico metidos dentro de cajas de marcas comerciales sean los protagonistas de la fiesta. Los niños, el niño, son los verdaderos protagonistas, las celebraciones NO SON COMIDA, son risas, son compañía, son amigos, son compartir.
- Tú, adulto, eres ejemplo en las fiestas infantiles: en una fiesta infantil no se fuma delante de los niños, no se bebe alcohol (y menos se emborracha uno, ¿es acaso tu fiesta?), no se producen situaciones de “adultos” y no se pasa uno el día del cumpleaños de su hijo aferrado a un móvil.
- Ah! Muy importante (esto me afecta muchíiiiiiiiiisimo) si hacéis fotos de los grupos, de los niños jugando, de los compañeros de tu hijo, de ese momento en que tu niño abraza a su amiguita… siempre, siempre, siempre, pedid permiso a los papas de los otros menores para compartir las fotos en redes sociales. Yo no comparto fotos de mi peque en ninguna red social, espero que los demás respeten eso.
Mis recetas de cumpleaños
Si te atreves a preparar tú los dulces, y más si en el proceso implicas al cumpleañero, puedes marcar un hito difícil de superar. Algunas de mis recetas adecuadas para un cumpleaños infantil son:
Cake pops: divertidos y muy versátiles. Cúbrelos del topping preferido de tu hijo
Muffins de diferentes sabores y formas: Muffins de mar, muffins de ferrero rocher y muffins de arándanos y chocolate negro
Tartas divertidas: Como esta que hicimos de unicornio, una tarta de leche merengada o quizás una tarta de pera y chocolate negro.
La decoración
Buscar una temática y que la decoración del cumpleaños gire entorno a ella puede ser un componente de éxito absoluto en la celebración. Con poco dinero podéis convertir una sala en una maravillosa selva dónde correr maravillosas aventuras, un jardín donde somos pequeños exploradores o un barco pirata preparado para la búsqueda del tesoro. Regala experiencias diferenciadoras:
En definitiva, los niños recuerdan momentos, abrazos, risas, cuentos, colores, dibujos, vida. Prestemos atención en que el cumpleaños sea económico, ecológico, empático, ESPECIAL.