No voy a ser yo la que diga que en Navidad comemos demasiado. Es algo obvio solamente viendo los anuncios de la tele con esas mesas repletas de platos dorados y fuentes para compartir. Pese a que en casa desde hace unos años hemos instaurado el menos es más, el menos de mi madre sigue siendo excesivo y normalmente no llegamos con hambre al plato principal, porque ya nos hemos hinchado de jamón, langostinos y picoteo diverso que llena la mesa “por si os quedáis con hambre”. Mi opción de menú navideño va a ser mucho más recatada: os voy a proponer unos entrantes, muy sencillos y saludables. La semana que viene cocinaremos un plato principal más contundente. Y, por último, compartiremos un postre sano, divertido y colorido para hacer las delicias de todos los invitados. Mi objetivo es que todo el mundo pruebe los tres platos y no se quede con hambre. Quiero que disfrutéis de la calidad de la comida, no de la cantidad sin control.
Empezamos con unos entrantes que, por supuesto, podéis engrosar con los clásicos langostinos o el plato de jamón. Se trata de dos tipos de tostas, de plátano macho y de quinoa, junto con un paté de hígado casero, un paté de mejillones y un queso crema de anacardos y compota de frutos rojos. ¿Os apetece? Poneros el delantal que comenzamos.
Ya os he enseñado a hacer las tostas en otras ocasiones, pero siempre que os enlazo otras recetas os sentís un poco perdidos, así que, para facilitar las cosas las voy a poner a continuación y así tenéis todo el menú preparado del tirón.
Tostas de plátano macho
Ingredientes
- 2 plátanos macho grande
- 100 gr de ghee
- Sal
- Ajo en polvo
- Sésamo
Preparación
Pelamos y cortamos los plátanos macho y los colocaremos en el vaso de la batidora, junto al ghee y la sal (un pellizco). Batiremos hasta que la masa esté homogénea. Es probable que tengamos que bajar la mezcla un par de veces con una espátula hasta que quede uniforme. No desistáis, al principio desespera un poco, pero finalmente se consigue.
Precalentamos el horno a 170 grados
Forramos una fuente de horno con papel vegetal y echamos encima la masa que extendemos hasta crear una base de unos 5 mm. Espolvoreamos con el ajo en polvo y el sésamo uniformemente e introducimos en el horno.
Pasados 10 minutos sacamos la fuente y con un cortador de pizzas cortamos la forma de las tostas. Volvemos a introducir en el horno.
Cocinamos durante 40 minutos más arriba y abajo y 10 minutos extras con solo la función de grill para acabar de tostarlas. Dejamos enfriar encima de una rejilla.
Tostas de quinoa
Ingredientes
- 100 gr de quinoa
- Agua
- Oregano, albahaca
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
Lavamos bien la quinoa (eso significa que la debemos enjuagar un par de veces hasta que deje de soltar espumita) para eliminar las saponinas y la ponemos en remojo un mínimo de tres horas. Escurrimos bien y ponemos en la batidora junto con el orégano, la albahaca y la sal y hacemos una masa uniforme. Pintamos con aceite de oliva un papel de horno y extendemos la masa dándole forma rectangular y ponemos al horno precalentado unos quince minutos. Damos la vuelta a la masa y procedemos a cortar con el cortador de pizza nuestras tostas. Dejamos unos diez minutos más o hasta que estén completamente tostadas. Tienen que quedar muy crujientes. Las dejamos enfriar sobre una rejilla.
Paté de hígado de pollo
Ingredientes
- 115 g de ghee
- 2 Cebollas picadas
- 2 dientes de ajo picados
- 225 g de hígado de pollo sin la grasa
- 1 cdita de romero
- 1 cdita de tomillo
- 1 pizca de nuez moscada molida
- 1 cucharada de brandy o de Oporto
- 2 cucharadas de nata sin lactosa
- Sal
- Pimienta
Preparación
En primer lugar, ponemos a derretir 30 gramos de ghee en una sartén, agregamos las cebolla y el ajo y los pochamos (ojo, no los tostamos, debemos dejar una textura suave). A fuego medio, incorporamos el hígado y las especias (esto va un poco a gustos, yo le añado tomillo, romero y nuez moscada, sal y pimienta). Los freímos durante 3 minutos o hasta que el hígado quede ligeramente rosado en el centro. Dejamos enfriar durante 15 minutos.
Ponemos en el vaso de la batidora y batimos los higaditos, con la mantequilla y la nata. Corregimos de sal y pimienta y servimos en un recipiente bonito. Mantenemos en la nevera y sacamos diez minutos antes de servir.
Paté de mejillones
Ingedientes
Para los mejillones en Escabeche:
- 2 kilos de mejillones gallegos
- 1 vaso de aceite de oliva virgen extra
- 1 vaso de vinagre de vino
- Una cucharada sopera de pimentón de la Vera dulce o semidulce
- 2 dientes de ajo
- 3 hojas de laurel
Para el paté:
- Los recortes de las tostas de quinoa que hemos hecho antes
- 1/2 cebolla pequeña
- 1/2 limón
Preparación
Un día o dos antes vamos a preparar nuestros mejillones en escabeche, solo usaremos unos 20 para hacer nuestro paté así que el resto los podéis servir junto a unas patatas chips (recordad que os enseñé a hacerlas con microondas).
Limpiamos bien los mejillones. Colocamos en una olla grande dos hojas de laurel y los mejillones (opcional es ponerles una copa de vino blanco, le da un punto mucho más sabroso). Los llevamos a ebullición con fuego fuerte y tapados. Desde que hierve los podemos dejar dos minutos a fuego fuerte (si retirar la tapa) o podemos ir retirando los que van abriendo.
Escurrimos bien los mejillones y reservamos medio vaso del agua de la cocción (tenéis que colarla bien para que se eliminen las impurezas) y los separamos de las conchas. Reservamos
Fileteamos los ajos y los incorporamos a una sartén con el vaso de aceite de oliva virgen extra a fuego fuerte y una hoja de laurel.
Cuando el ajo esté dorado retiramos del fuego y añadimos una cucharada sopera de buen pimentón. Removemos rápidamente con una cuchara de madera para que no se queme y añadimos, para enfriar, el vinagre y el agua de cocción que reservamos previamente.
Con esta mezcla cubrimos los mejillones, es muy importante que estén completamente cubiertos. Cuando se haya enfriado meteremos en la nevera. Cuantos más días estén en la mezcla mejor será el resultado final.
El mismo día de la cena cogemos unas veinte piezas del mejillones junto con dos cucharadas grandes del escabeche, media cebolla picada, el jugo de medio de limón y los recortes que nos hayan quedado de nuestras tostas de quinoa (el equivalente a una tosta entera). Batimos muy bien hasta dejar una pasta fina que serviremos en un bol. Mantenemos en la nevera hasta su uso y servimos con un mejillón picado encima.
Queso cremoso de anacardos y compota de frutos rojos
Ingredientes
Para el cremoso de anacardos
- 1 taza de anacardos (en remojo toda la noche)
- 3 cucharadas de levadura nutricional
- ½ cucharadita de vinagre manzana
- ¼ de taza de agua
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- 1 y ½ cucharadas de zumo de limón
- ½ cucharadita de sal
- 1 cucharadita de ajo polvo
- 1 cucharadita de cebolla polvo
Para la compota de frutos rojos
- 1 taza de frambuesas y arándanos (frescos o congelados)
- 1 cucharada de agua
- 1 cucharada de miel
Preparación
Normalmente yo hago la compota de frutos rojos en la crock pot, pero me pedís mucho como hacerla sin tener la olla. Muy sencillo. Solo tenemos que poner los arándanos y frambuesas (si son frescos directamente después de lavados y si son congelados esperamos a descongelarlos) en una olla junto a una cucharada de agua y dos cucharadas de miel. Vamos cocinando a fuego lento con cuidado y removiendo con una cuchara de madera continuamente para que se vayan deshaciendo las frutas. A mi personalmente me gusta que queden trozos sin deshacer del todo pero podéis pasarla por una batidora si queréis una textura más uniforme. Dejamos enfriar y metemos en la nevera.
El paté de anacardos la única preparación previa que necesita es que dejemos los anacardos en remojo unas 24 horas antes. Ponemos en el vaso todos los ingredientes y batimos bien.
En este caso, es mejor que montéis vosotros las tostas antes de servirlas, pero no con demasiada antelación para no humedecerlas. Pondremos una capa del queso de anacardos y una cucharadita de la compota de frambuesas.
Resumiendo
Con las tostas, nuestros patés, los mejillones en escabeche sobrantes y un buen plato de jamón y otro de langostinos, tenemos la mesa cubierta para empezar a comer. Ya me contáis que os parece y si os atrevéis a hacerlo.