No lo voy a negar, de hecho algunos ya lo sabéis, y los que no, lo comprobaréis en el curso de Microbiota del sábado que viene: hablo con total libertad de defecar, cagar, plantar un pino o asomar el hocico… Soy así, soy llana y simple, y pienso que nos perdemos un gran mundo por no querer hablar de la caca.
Las heces de una persona son el reflejo de su salud digestiva y extradigestiva. El color, el olor, la forma, su contenido… existen muchos análisis dedicados a analizar nuestros deshechos, y gracias a ellos podemos detectar infecciones (como de parásitos, virus o bacterias), absorción deficiente de nutrientes o cáncer.
Las heces se pueden examinar para determinar si hay sangre oculta (hematorrea), grasa (esteatorrea), fibras de carne, bilis, glóbulos blancos y azúcares, llamados sustancias reductoras. También se puede medir el pH de las heces. El cultivo de heces se realiza para averiguar si las bacterias pueden ser la causa de una infección.
En un par de entradas hablaré de enfermedades relacionadas con nuestras deposiciones, hepatitis, úlceras, problemas con la vesícula, etc. Pero hoy empezamos con lo básico, la diarrea y el estreñimiento.
¿Qué es la diarrea?
La diarrea se define como un síndrome caracterizado por un incremento en la frecuencia, el peso o el contenido de agua en las heces. LA OMS establece que existe diarrea cuando hay tres o más deposiciones de baja consistencia al día, o en las que se observa la presencia de elementos anormales como pus, sangre o moco.
Normalmente hablamos de diarrea como una respuesta inespecífica del intestino ante distintas situaciones: infecciones, fármacos, inflamación intestinal, contaminación, enfermedad celiaca…
Los tipos de diarrea se establecen en función de su duración:
- Diarrea aguda: con una duración inferior a 14 días. Normalmente de carácter infeccioso y que se suele acompañar de otras manifestaciones físicas (si se alarga en el tiempo se llama persistente)
- Diarrea crónica: Su duración se extiende de tres a cuatro semanas y generalmente surge derivada de otra patología (congénita o adquirida)
Tratamiento dietético
La recomendación dietética más importante que os puedo dar en cuanto a la diarrea es la rehidratación oral que nos ayude a recuperar los líquidos y los electrolitos perdidos. La alimentación y la introducción de alimentos se hará de forma progresiva, comenzando con una dieta de fácil digestión, con manzana, pollo hervido y algunas verduras suaves cocinadas al vapor.
En casos de diarrea persistente, debemos acudir al médico. Son especialmente peligrosas en bebés, embarazadas, ancianos y personas inmunodeprimidas.
¿Qué es el estreñimiento?
El estreñimiento es aquella situación en la que el individuo hace menos de tres deposiciones por semana siendo las heces duras y con bajo contenido en agua.
Existen varios tipos de estreñimiento según su origen:
- Estreñimiento primario (se deriva de hábitos higiénico dietéticos)
- Pobre ingestión de fibra y agua
- Exceso de sedentarismo
- Anular de forma voluntaria el acto de defecar (ya sea por convicciones sociales, laborales o de otros tipos)
- Abuso de tabaco o bebidas estimulantes como café, té, bebidas de cola…
- Estreñimiento secundario (derivado de una patología intestinal)
- Estreñimiento iatrogénico (derivado del consumo de fármacos)
Tratamiento higiénico dietético
Estas son las recomendaciones que deberemos seguir:
- Debemos crear hábitos de defecación, elegir una hora determinada (preferiblemente después de comer), dedicar el tiempo necesario y no reprimir las ganas de evacuar.
- Tomar suficiente líquidos y fibra soluble (verduras, frutas con piel)
- Realizar ejercicio de forma habitual.
Un estreñimiento crónico puede provocar desde la aparición de fecalomas graves o creación de divertículos en el intestino. En casos muy severos y prolongados puede ser causa de cáncer colorrectal.
¿Empezamos a hablar más de cacas?
Actualización
Mi amiga Isa me hizo unas correcciones que pongo a continuacion:
La hematorrea es la salida con fuerza de sangre de una lesión en el cuerpo, normalmente una incisión. Para referirnos a la sangre se utilizan otros términos dependiendo de si la sangre se observa fresca o digerida en las heces. Cada una significa diferentes enfermedades. Y son: rectorragia (o proctorragia) sangre fresca que se ve a simple vista; y melenas es cuando las heces son negras y tiene un olor característico, esta es sangre digerida.