Después de que esta semana muchos de vosotros me hayáis compartido las publicaciones que está haciendo un conocidísimo nutricionista influencer hablando de forma negativa sobre el Ayuno Intermitente, solo diré que hace mucho que dejó de interesarme lo que se publica en Twitter y en Instagram en favor de lo que se publica en Pub med.
Generalizar, en cualquier ámbito, es horrible. Tú no eres igual que ella, ni ella es igual que él, ni él es igual que su padre, ni su padre se parece a mi. Ni el ayuno intermitente es para todos ni no lo es para nadie. En general podría deciros que son muchas más las personas que pueden beneficiarse del Ayuno Intermitente que las que pueden salir perjudicadas al practicarlo, pero en un momento en que mucho gente despierta del Matrix de las cinco comidas al día y empieza a darse cuenta de que comemos mucho más de lo que debemos, lo que genera más polémica y más atención es afirmar justo lo contrario.
Hay mucha gente que por un like diría hasta que come piedras.
Yo a lo mío que hoy os traigo un cotton cheese cake muy bajo en carbohidratos. ¿Os apetece?
Cotton cheesecake (versión sin carbos)
Plato: PostreCocina: CetogénicaDificultad: Fácil8
porciones15
minutos15
minutosIngredientes
5 huevos
1 cucharada de eritritol
1 pizca de sal
4 cucharadas colmadas de queso crema casero
1 cucharada de harina de almendras
1 cucharadita de levadura
Compota de frutos rojos sin azúcar para decorar
Pasos
- Separamos con cuidado las claras de las yemas.
- Ponemos las claras en un bol (preferiblemente frío) y añadimos la pizca de sal y el eritritol y llevamos a punto de nieve con ayuda de unas varillas eléctricas.
- En un bol a parte ponemos las yemas y el queso crema e integramos bien. Añadimos la harina de almendras y la levadura y seguimos mezclando hasta tener una masa uniforme.
- Encendemos el horno a 175 grados.
- Vamos a ir incorporando la mezcla de las yemas y el queso crema a nuestras claras a punto de nieve ayudándonos de una espátula y mediante movimientos envolventes. Si no queremos que se nos baje la mezcla debemos ir volcando poco a poco (al menos en 4 veces) la mezcla de las yemas en el centro de las claras montadas, removiendo solo lo justo para que la masa se vea uniforme. Si removemos demasiado empezará a aguarse demasiado.
- Volcamos con cuidado la masa en un molde (si no es de silicona ponemos un poquito de aceite de oliva o mantequilla en la base y los laterales para que luego podamos desmoldar bien)
- Hornearemos nuestro pastel durante unos 15-20 minutos (o hasta que presente un aspecto dorado), apagaremos el horno y dejaremos enfriar primero dentro sin abrir la puerta, y a posteriori lo sacaremos para que acabe de enfriar encima de una rejilla
- Decoramos con una capa de compota de frutos rojos.
Consejo de Nur
- La cobertura puede ser también una capa de chocolate negro o una copota del sabor que más os guste, incluso un buttercream de vainilla o chocolate, pero es cierto que un pastel tan esponjoso como este requiere la mayor sencillez posible en su decoración.
- Mi nuevo molde de silicona redondo
- El eritritol que uso yo