Hace tres días que llegó la primavera, no solo al Corte Inglés, también a nuestras vidas y, aunque no se note en la climatología porque sigue haciendo un frío que te pone “rojitas las orejas”, si se empieza a notar en el humor de algunos de los que me rodean. De repente todo el mundo esta cansado y sin energía, le duele la cabeza, le cuesta dormir y tiene en general falta de motivación (laboral, deportiva, sexual…): es la astenia primaveral.
Se discute mucho sobre si la astenía primaveral debe tratarse como una patología en si misma o si bien es un transtorno adaptativo, lo que está claro que en un par de semanas está superada y se vuelve al estado habitual sin ningún tipo de repercusión física para quien la ha padecido.
Pero, ¿por qué se produce? Pues probablemente por la confluencia de varios factores que afectan a los ritmos circadianos del individuo. Estos factores, de caracter sobre todo ambiental son:
a) El cambio climatológico con el aumento de las temperaturas y la presión atmosférica
b) Aumento de las horas de luz diurna
c) Cambio de hora
En definitiva, somos osos que hemos estado hibernando durante la época de frío (ralentizando nuestra actividad) y ahora debemos volver a funcionar, a despertar de nuestra gran siesta.
Para combatir la astenia primaveral, o al menos hacerla más llevadera, la alimentación es la clave.
- Hidratación suficiente: Si bien siempre os recomiendo que bebáis con sed, en este caso os digo que intentéis beber un poco más de los que os pida el cuerpo. Es importante esforzarnos por estar bien hidratados.
- Alimentación rica en productos frescos con la finalidad de llevar una alimentación sana y, sobre todo, rica en vitaminas y minerales, es preferible tomar frutas y verduras a diario (cinco raciones entre ambos tipos de productos). Es fundamental, además, que buena parte de las frutas y verduras las tomemos en crudo para aprovechar mejor las vitaminas que contienen.
- Aumentar la ingesta de ácidos grasos omega 3: Fundamentalmente por su capacidad antiinflamatora. Los ácidos grasos omega 3 se encuentran en pescados azules, nueces.
- Comer tres veces al día: Evitando tener el aparato digestivo continuamente en marcha y digestiones largas y pesadas que nos ocasionará estar todo el día de bajón ya que nuestro cuerpo estará demasiado ocupado digiriendo como para dedicar muchos esfuerzos a otros menesteres.
- No abusar de los estimulantes: Evitando té, café, refrescos.
Además es importante incorporar ejercicio a nuestra rutina diaria y crear hábitos de sueño, acostándonos pronto, evitando leer en la cama, y durmiendo las horas necesarias. Solo de esta forma conseguiremos pasar de la mejor forma posible por el proceso de adaptación a las estaciones cálidas del año. A los que, como yo, no tengan tiempo de tener astenia primaveral y siguen más alterados que nunca corriendo de lado a lado, también nos conviene relajarnos. La primavera es una dura prueba para todos… convencida estoy que es un invento de la modernidad. 😉 Vamos a intentar superarla de la mejor forma posible.