Aunque hace casi un mes que no aparece una receta nueva en el blog (mis vacaciones de este año me requerían concentración en otros menesteres), lo cierto es que no he parado de recoger y escribir en mi movil posibles ideas para publicar este invierno. Vais a ver un claro reflejo de la cocina menorquina en las publicaciones que vienen, pero es que he descubierto algunas recetas en la libreta de la mamma que no pueden ser solo herencia familiar.
Aunque me cueste que me deshereden yo las voy a compartir con vosotros.
La receta de hoy no es una de ellas, es algo que se me ocurrió hacer el otro día cuando ví que me habían sobrado cuatro lomitos de salmón al horno y que estaban algo secos para tomarlos sin más. Estuve pensando si hacer unas ketocretas o un pastel de pescado y al final pensé.y ¿si hago unos blinis de samón y los sirvo con queso crema?.
Esta no deja de ser una receta curiosa porque tradicionalmente los blinis se sirven con salmón ahumado… podríamos decir que es un blini deconstruido… si es que ya soy hasta chef de vanguardia! 🙂
Blinis de salmón
Plato: Todo usoCocina: CetogénicaDificultad: Básico12
porciones5
minutos30
minutosIngredientes
300 gr de salmón cocinado (yo he usado sobras de una cena anterior)
3 claras de huevo
4 cucharadas de harina de almendras
1 puñado de queso emmental rallado
1 lata de atún
Una pizca de sal
1 cucharada de especias al gusto (este ingrediente es opcional)
Pasos
- Ponemos en la procesadora de alimentos el salmón desmigado junto con el resto de los ingredientes y procesamos hasta obtener una masa uniforme.
- Precalentamos el horno a 175 grados.
- Con ayuda de un aro de emplatar pequeño (para darles la forma perfecta) vamos a ir poniendo sobre la bandeja del horno cubierta con un papel de hornear, cucharadas de masa de unos 15 ml. Recordad que los blinis son un poco más grandes que un canapé y tienen que quedar un poco gorditos (tipo una tortita de desayuno en tamaño miniatura).
- Horneamos durante unos 25 minutos.
- Sacamos del horno con cuidado y los giramos con cuidado con ayuda una espátula. Horneamos 5 minutos más por el otro lado.
- Sacamos del horno y dejamos enfriar.
- Tened la precaución de guardarlos en un recipiente seco y sellado para que no se estropeen… si es que llegáis a tiempo de guardarlos.
Consejo de Nur
- Están buenísimos servidos con queso crema y un poco de cebollino picado.
Las elaboraciones como la de hoy están hechas para ocasiones especiales y no son parte esencial de tu dieta, sin embargo en Barriga Sana pensamos que comer bien también debe ser divertido de vez en cuando.
Si requieres la ayuda de un profesional de la nutrición para poner orden en tu dieta no dudes en escribirme: contacto@barrigasana.com