DESCRIPCIÓN

El mundo tal y como lo conocíamos ha cambiado, las reglas del juego son otras y los partidos de la vida se juegan en redes sociales como Instagram. Imágenes de chicas que lo tienen todo, belleza, ropa, maquillaje… el novio perfecto, la boda maravillosa y… el embarazo deseado por todas. No solo no engordan nada, más aún, mantienen unas abdominales embarazadas que no he tenido yo ni en mis mejores días en el gimnasio. En este contexto se enclava la pregorexia (concepto que nace en 2008 de la unión de pregnancy and anorexy), el Trastorno de la Conducta Alimenticia en el cual la embarazada sigue una estricta dieta y una firme rutina de ejercicios para no subir peso durante el embarazo de manera que pone en peligro su propia vida y la del feto.

En un estudio realizado en Reino Unido en 2017, un 7,6% de las mujeres embarazadas presenta problemas alimenticios y un 23,4% vive su embarazo con continuo miedo a engordar. Es cierto que la pregorexia en muchos casos surge en mujeres que han padecido con anterioridad un trastorno como anorexia o bulimia, pero también ocurre en casos en los que no se ha tenido ninguna historia clínica en este contexto.

SÍNTOMAS

– Las mujeres embarazadas que sufren pregorexia se niegan a hablar de su estado de gestación, rechazan su embarazo y no aceptan los cambios que se están realizando en su cuerpo.

– Presentan obsesión con el peso y con la comida intentando una reducción calórica que les ayude a no ganar peso.

– Se someten a sesiones de ejercicio intenso incluso en etapas avanzadas de embarazo.

– No solo no cogen peso durante el embarazo si no que en algún caso lo pierden.

– Inducción al vómito después de comer.

– Tal y como ocurre en todos los TCA la afectada niega que sufra cualquier tipo de problema.

CONSECUENCIAS

Las consecuencias de la plegorexia pueden llegar a ser muy graves:

• Anemia
• Perdida de cabello, debilidad en las uñas y la piel
• Falta de calcio
• Malformaciones en el feto
• Pérdida de líquido amniótico
• Retraso en el crecimiento del feto
• Muerte fetal

TRATAMIENTO

La pregorexia tiene un fondo de enfermedad claramente de tipo psiquiátrico, pero también de conducta alimenticia. Es por ello que las pacientes que padezcan este tipo de patología deberán ser asistidas por un equipo multidisciplinar que incluya por lo menos a un psicólogo, médico Endrocrino, Dietista y nutricionista, enfermeros…

A nivel psicológico:

Será el psicólogo quien marque la línea a seguir por todos los profesionales involucrados en el proceso con el objetivo de que actúen todos al unísono. El objetivo principal es concienciar a la paciente de su estado de gestante, normalizar su embarazo, pero siendo consciente del mismo y acercando a la mujer a su futura situación de maternidad.

A nivel nutricional:

• Mantener un ambiente relajado durante las comidas.
• Establecer horarios de comidas y crear una rutina alimenticia
• Enseñar pautas de alimentación saludable que ayuden a la paciente a mantener, facilitando el desarrollo correcto del feto.
• No forzar ni agobiar a la paciente con la cantidad, los ingredientes o las formas de alimentarse ya que podemos provocar el efecto contrario al esperado.
• Procurar la ingesta necesaria de micronutrientes (hierro, calcio, yodo, ácido fólico y vitaminas) si es necesario mediante suplementación.

Si estás sufriendo una situación parecida en tu vida o conoces a alguien en tu entorno que lo sufra no dudes en ponerte en manos de un profesional que pueda guiarte. En estos casos un nutricionista y un psicólogo serán tu máximo apoyo. Además la ONG Adaner está a tu disposición para ayudarte: http://adaner.org/