Desde que el señor que duerme a mi lado decidió que iba a desayunar “cereales” y empezó a acumular bolsas de copos de diferentes cosas que jamás se comía, yo empecé a hacer galletas con ellos.
Comenzamos con galletas de avena (que sabéis que aunque esté etiquetada sin gluten no entra dentro de mi alimentación), luego probé con una granola sin gluten de trigo sarraceno, y de ahí pasé a los copos de quinoa con chocolates negro… y he de deciros que todas ellas son las galletas más buenas que vais a encontrar en este blog. Son crujientes pero cremosas, dulces, pero no en exceso y aguantan bien el paso del tiempo.
Lo cierto es que le he cogido tanto el gustillo a hacer galletas y en mi casa tanto a comérselas, que ya le tengo interiorizado el truco de la textura que necesito y ni peso ni mido nada de lo que uso. Pretendo que vosotr@s seáis capaces de hacerlo también, ¿lo intentamos?
Galleteo (galletas con copos)
Plato: Cuando quierasCocina: Sin gluten, sin azúcarDificultad: fácil7
porciones5
minutos25
minutosIngredientes
100 gr de copos de (avena, quinoa, trigo sarraceno…)
1 cucharada grande de mantequilla de almendras (o de mantequilla de cacahuete o mantequilla normal)
1 cucharada grande de miel o sirope de arce o endulzante
2 claras de huevo
Esencia de vainilla
Nibs de chocolate negro
1 cucharadita de levadura sin gluten
Extras: Frutos secos, coco rallado, almendras picadas…
Pasos
- Precalentamos horno a 180 grados.
- Ponemos los copos de avena, quinoa, trigo sarraceno, la mantequilla elegida, la miel, la levadura química, unas gotas de la vainilla y las dos claras de huevo en un procesador de alimentos y mezclamos bien. Hemos de obtener una masa pegajosa.
- Incorporaremos a la masa los nibs de chocolate negro y mezclaremos con ayuda de una espátula.
- Yo uso una cuchara de servir helado para hacer galletas de las mismas proporciones pero podemos usar las manos ligeramente mojadas para ir haciendo bolas de masa que aplastaremos en forma de galleta.
- Ponemos nuestras galletas sobre un papel vegetal en nuestra bandeja del horno y adornamos con frutos secos, almendra picada, coco rallado… (lo que más nos guste).
- Horneamos por unos 25 minutos o hasta que veamos que las galletas presentan un aspecto dorado y crujiente (no os preocupe si al sacarlas están aún un poco blandas, endurecen al enfrirarse).
- Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Consejo de Nur
- Podéis bañar vuestras galletas en chocolate negro o con un hilo de dulce de leche paleo, aunque sin nada están perfectas.
- Laminas de horno de silicona
Si todas tus dietas fracasan igual es que el problema no está en la comida si no en la relación que tienes con ella.
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¿No se podría poner el huevo entero?
Gracias 🙂
En este caso con el huevo entero las galletas cogen un sabor como a tortilla.